Juan Capítulo 13

Introducción

INTRODUCCIÓN GENERAL

V. Sobre la portada

Obra: Milagros, sacrificio y resurrección. Medio: Acuarela y bolígrafo
Medidas: 7” x 10”
2022

El contenido de este arte desarrolla lo más impactante del libro de Juan en lo doctrinal, escatológico y práctico. Lo primero que veremos es la tinaja de piedra, representando el primer milagro de Jesús.
La mano y sangre representan el verso que habla sobre el sacrificio mayor, de tal manera amó Dios al mundo, con el amor sacrificial que entregó a su Hijo. La paloma la aceptación del Padre, el ojo es el símbolo que representa el milagro de dar vista a los ciegos en representación también a nuestra vista espiritual.

La Silueta de Jesús es el motivo de nuestra fe, la resurrección, al otro extremo vemos unos puntos azules representando la escatología, en la parte de abajo vemos una corona con pie humano, son los pasos de Jesús en la tierra proclamando el Reino de Dios.


Capítulo 13
Jesús lava los pies de sus discípulos
1. Antes de la fiesta de la Pascua, sabiendo Jesús que la hora para regresar al Padre había llegado, y habiendo amado sacrificialmente a su gente, los que estaban en este mundo, los amó extremadamente.
2. Durante la cena, el opositor ya había convencido en su corazón a Judas Iscariote, hijo de Simón, para que lo entregase.
3. Sabiendo Jesús que el Padre le entregó todas las cosas en sus manos, y que de Dios salió, y hacia el mismo Dios iba;
4. se levantó en medio de la cena, puso a parte su manto, y tomando una toalla, la ató en su cintura,
5. luego echó agua en una vasija y empezó a lavar los pies de sus discípulos y los secaba con la toalla.
6. Cuando Jesús se acercó para lavarle los pies a Simón Pedro, este dijo: – Señor, ¿Tú me vas a lavar los pies?
7. Jesús replicó: – Lo que yo hago, tú no lo entiendes ahora, pero lo entenderás después.
8. Entonces Pedro contestó: – Maestro, nunca me lavarás los pies; Jesús le respondió: – Si no te lavo los pies, no estarás unido a mí.
9. Simón Pedro dijo:- Señor, siendo así, lávame no solamente los pies, sino también las manos y la cabeza.
10. Jesús le dijo: – El que está bañado, no tiene necesidad de lavarse, excepto de pies; ya que ustedes están limpios, pero no todos.
11. Jesús sabía quién lo iba a entregar, por esto dijo “no todos están limpios”.
12. Cuando Jesús acabó de lavar los pies a sus discípulos, tomó su manto, nuevamente se reclinó y dijo: – ¿Entendieron el significado profundo de lo que acabo de hacer?
13. Ustedes me llaman maestro y Señor, y lo han dicho bien, porque lo soy.
14. Pues, si yo siendo Señor y maestro, les lavé los pies a ustedes, con mayor razón, ustedes se deben lavar los pies los unos a los otros;
15. ya que les di ejemplo, así como yo lo hice, ustedes también lo deben hacer.
16. De cierto, de cierto les digo, no es el siervo mayor que su señor, ni el enviado mayor que el que le envió.
17. Si ustedes saben estas enseñanzas, serán muy felices si las practican.
Jesús anuncia quién lo iba a traicionar
18. No me refiero a todos ustedes; yo sé a quiénes elegí, pero para que la Escritura se cumpla: “El que compartió de mí el pan, se volvió en contra mía.”
19. Desde ahora les digo estas cosas, antes que sucedan, para que cuando sucedan, ustedes crean que yo soy el Mesías.
20. En verdad, en verdad les digo, el que recibe a quien envié, a mí me recibe, y el que me recibe, recibe al que me envió.
– Dijo Jesús.
21. Jesús, habiendo dicho estas cosas, se entristeció en su espíritu y declaró:
– En verdad, en verdad les digo, que uno de ustedes me entregará.
22. Los discípulos se miraban mutuamente y estaban inquietos acerca de quién hablaba.
23. Uno de los discípulos estaba reclinado en el hombro de Jesús, era un discípulo muy amado por el maestro.
24. Simón Pedro, le hizo señas al discípulo amado, para que este preguntase a Jesús a quién se refería.
25. El discípulo amado, que estaba recostado en el hombro de Jesús, le preguntó: – Señor, ¿quién es?
26. Respondió Jesús: – A quién yo le dé el pan mojado, ese es. Mojando el pan, se lo dio pues a Judas Iscariote, hijo de Simón.
27. Después de haber comido el pan mojado, entró satanás en el corazón de Judas.Y Jesús le dijo: – Lo que vas a hacer, hazlo de una vez.
28. Pero ninguno de los que estaban en la mesa, entendió las palabras de Jesús,
29. pues, como Judas manejaba la tesorería del grupo, algunos pensaban que Jesús le había dado una orden, para que comprara lo que faltaba para la cena de Pascua o para que diera un dinero a los pobres.
30. Habiendo comido el pan mojado, salió enseguida; ya era de noche.
El nuevo mandamiento
31. Entonces, cuando salió Judas, dijo Jesús:- Ahora será glorificado el Hijo del hombre, y Dios será glorificado en Él.
32. Si Dios será glorificado en Él, también Dios lo glorificará en Él mismo, y lo hará muy pronto.
33. Hijos míos, aún estaré con ustedes por un corto tiempo, me buscarán, y lo mismo que le dije a los judíos, les digo a ustedes, que a dónde yo voy, ustedes no pueden venir.
34. Un mandamiento nuevo les doy, que se amen con amor sacrificial los unos a los otros, como yo los amé, con mi propia vida, y también ustedes, ámense mutuamente con amor sacrificial.
35. Por la práctica del amor sacrificial, el mundo conocerá que ustedes son mis discípulos, si se aman sacrificialmente entre ustedes.
Jesús anuncia la negación de Pedro
36. Entonces, Pedro dijo: – ¿A dónde vas Señor? Jesús respondió:
– A dónde voy, tú no puedes venir ahora, pero más tarde podrás venir.
37. Pedro contestó:
– Señor, ¿Por qué no te puedo seguir?
¡Maestro, yo daría mi vida por ti!
38. Jesús replicó:
– ¿Tú darías la vida por mí?
En verdad, en verdad te digo, antes de que el gallo cante, me habrás negado tres veces.

 



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